Cuando hay tantos y tantos niños esperando ser asignados a una familia, no es extraño que un expediente sea visto varias veces antes de que su familia perfecta los encuentre al fin. Michael y Daisy son dos de estos niños. Llevan esperando en la lista compartida desde hace tiempo y están los dos en nuestro programa de educación en Chenzhou. Y tenemos la enorme alegría de informar que su orfanato ha acordado CONDONAR la tasa de donación al orfanato a las posibles familias interesadas en adoptarles!
Daisy tiene nueve años. Esta preciosidad tiene una estupenda auto-estima y mucha independencia. Irradia seguridad en sí misma cuando actúa, y siempre se presta inmediatamente voluntaria para cualquier actividad o actuación en su colegio de necesidades especiales. Se viste sola y sabe hacer otras muchas cosas por sí misma.
Mírala aquí en una actuación reciente! ¿Sabes quién es Daisy?
Es una niña activa y le encanta montar en bicicleta, los columpios y el sube-y-baja. También es una pequeña artista a la que le gustan los colores vivos, dibujar manzanas, globos, sandías y mucho más!
Su pronunciación no es perfecta, pero su lenguaje sigue desarrollándose y ha aprendido a decir muchas palabras en chino, a escribir y contar los números del 1 al 5, e incluso algunos caracteres chinos.
Si necesitas ayuda en clase, Daisy es tu chica puesto que es una magnífica ayudante. Daisy tiene Síndrome de Down y una cardiopatía. Además de que su orfanato ha renunciado a la tasa de donación por adopción, también está en la lista de Reece’s Rainbow con una beca de ayuda a la adopción de 1.716$ (la llaman “Regina”)!
Michael, que ya ha salido en este blog en el pasado ("Encantador y vivaz Michael") está en el mismo programa educativo que Daisy. Tiene casi 12 años.
Michael tiene una disposición alegre y se le conoce por saludar a las personas que se le presentan con mucha educación. Al igual que Daisy, él también participa en las actuaciones del colegio o las del orfanato. Ha aprendido a cantar canciones y es tanto independiente como colaborador.
Considerado como un "hermano mayor", ayuda a atender a los niños más pequeños. Y como un buen hermano mayor, juega mucho con ellos también.
Michael es respetuoso y se lleva muy bien tanto con niños como con niños. Progresa bien en el colegio -participa en clase respondiendo a las preguntas y ha aprendido a leer en voz alta, a escribir caracteres chinos y los números. Sabe sumar y restar números pequeños.
En su tiempo libre dibuja el sol, casas y coches.
Tiene algunas necesidades especiales que incluyen retraso en el desarrollo, fisura labial y palatina, y ataques de epilepsia que maneja de forma independiente. Ahora sabe cuándo va a darle un ataque y se lo hace saber a la profesora. Le dice que necesita salir y se sienta un rato solo hasta que se encuentra bien otra vez y se le ha pasado. Siempre vuelve a clase con una preciosa sonrisa amistosa en su rostro.
Debido a una serie de desafortunadas circunstancias, es muy posible que ni él ni Daisy puedan asistir más al colegio después de este próximo verano. Pensamos que les va a decepcionar tanto como a nosotras el no poder tener el mismo nivel de educación que tenían hasta ahora. Y sinceramente esperamos que puedan ser adoptados para que puedan seguir creciendo y aprendiendo en el seno de una familia cariñosa.
Estamos tratando de hablar de los niños de nuestros programas que llevan esperando un mes o más tiempo en el sistema de adopción sin haber encontrado a la familia perfecta para ellos, con la esperanza de que la familia adecuada para ellos pueda estar entre nuestros lectores. O en el caso de España, que las familias puedan conocer un poquito a los niños que están detrás de las etiquetas de las patologías o las condiciones médicas que les hacen estar en pasaje verde.
Ojalá que el hablar de estos dos pequeños les ayude a ser asignados con sus familias para siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario